En el marco del primer plan intercomunal metropolitano para Santiago fue planificado como un gran equipamiento deportivo y de recreación para la ciudad. El urbanista austriaco Karl Brunner fue el encargado de su creación marcando un cambio en la sociedad de la época al convertir el deporte en una manifestación de connotación
pública y masiva. Su estilo es representativo de la arquitectura
moderna, emplazado en un terreno de aproximadamente 58 hectáreas, que
por su tamaño destaca en el tejido urbano de la ciudad de Santiago.
Se construye en la antigua parcelación de lo Valdivieso, entre 1937 y 1938, según el diseño de los arquitectos Ricardo Müller, Aníbal Fuenzalida y Roberto Cormatches, ejecutado por la empresa constructora Salinas y Fabres durante el gobierno del presidente Arturo Alessandri Palma.
Para darle una salida se abrió una amplia avenida que en parte cruzó
los terrenos de los Campos de Sport de Ñuñoa, construidos anteriormente
en 1918.
Desde 1962 se han realizado importantes eventos como el Mundial de
Futbol, los clásicos universitarios, también competencias atléticas,
tenísticas, ciclismo entre otras actividades deportivas de carácter
nacional e internacional.
Ha sido también escenario de variados actos
políticos y culturales, en 1968 se celebró el paso de la reina Isabel de
Inglaterra, en 1971 el líder cubano Fidel Castro pronunció un extenso
discurso y al año siguiente hubo un masivo homenaje al recién
galardonado Premio Nobel de literatura Pablo Neruda, en 1987 estuvo el Papa Juan Pablo II.
La historia oscura de este centro deportivo
se produjo entre septiembre y noviembre de 1973, período en el que fue
el centro de detención de prisioneros políticos más grande en Chile. El
camarín norte del centro de piscinas, el caracol sur y el túnel sur
poniente del Velódromo fueron lugares de reclusión de miles de detenidos
políticos, los militares realizaron interrogatorios, torturas y
fusilamientos. Tras la dictadura de Pinochet, el uso del recinto ha sido el deporte y los espectáculos masivos. Desde 1985 comenzaron a realizarse recitales de música en el estadio, el velódromo y el court central de tenis.
En cuanto a su función cívica, desde el retorno a la
democracia, el Estadio Nacional ha funcionado como el mayor centro de
votación del país.
Fuente: Consejo de Monumentos Nacionales
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